Deshazte de 100 cosas de una sola vez en 60 minutos
Ya sabes que no he sido siempre una persona organizada. He llegado hasta aquí a base de ir dando pasitos, como siempre recomendamos. Hoy tengo 10 minutos y organizo un cajón, por la mañana mientras se hace el café recojo el lavaplatos o mientras espero en el dentista organizo el bolso y tiro todos los tickets que se han acumulado.
Poco a poco después de varios años puedo considerar que mi casa y mi vida están más o menos organizadas y sé como mantenerlo. Pero mientras daba esos pequeños pasos había momentos en que me entraban unas ganas locas de avanzar deprisa, de coger carrerilla y ver un cambio más radical que los pequeños cambios que se iban vislumbrando. Algo así como "Fast and Furious". Un ataque de orden. Y eso es lo que os propongo hoy. Una sesión de 60 minutos en que vayas por toda la casa deshaciéndote de hasta 100 cosas en una hora para acabar con una enorme sensación de alivio y desahogo. ¿Te animas?
Empezamos
Si estás en ese momento de tu vida de simplificarte y dejar de lado todo lo que no necesitas, hoy es un buen momento para ponerte manos a la obra y conseguir un cambio radical. Coge el cronómetro, marca los 60 minutos, agarra un par de cajas o bolsas, una para tirar y otra para donar, escoge las zonas de la casa en las que más se necesita despejar, como las que ahora te voy a contar, y haz la lista de las zonas y los 100 objetos que van a ser víctimas de tu ataque de orden. Así irás a tiro hecho y no perderás tiempo pensando por dónde empezar.
10 cosas del baño
Por ejemplo,
- Muestras de productos que no usas
- Productos abiertos pero que no te gustan
- Toallas viejas
Dona a algún albergue social los productos sin abrir que no sabes por qué están allí y no los quieres.
10 cosas del cajón de la entrada
Por ejemplo,
- objetos que no sabes ni para que sirven, no los has visto en la vida, nunca lo has necesitado y, por tanto, raro será que lo necesites en el futuro (Pregunta antes si no es tuyo ...).
10 cosas de la cocina
Por ejemplo,
- Pequeños electrodomésticos que no usas o no funcionan
- Objetos que tengas repetidos
- Tazas, vasos, copas o platos que no te gustan y no utilizas jamás
- Alimentos que han caducado
Los alimentos sin abrir aprovecha para donarlos a una ONG o a tu parroquia.
10 cosas de tu ordenador
También la basura digital cuenta aunque no la veas a simple vista. Aunque aquí te puedes cargar de golpe las 100 cosas, pero no te quedes solo en esto. Por ejemplo,
- Archivos que nunca abrirás
- Fotos borrosas o repetidas
- Emails recibidos o enviados que no necesitas mantener
10 cosas del armario de ropa blanca o el cuarto de la lavadora
Por ejemplo,
- Sábanas viejas
- Toallas viejas
- Mantas viejas
Todo lo puedes donar a asociaciones protectoras de animales que siempre les vienen de perlas.
10 cosas de tu armario de manualidades o papelería
Por ejemplo,
- todo lo que no usas y ya no tienes interés. Dónalo a una escuela en una zona en riesgo de exclusión.
10 cosas de tu dormitorio
Por ejemplo,
- Libros que ya no quieras
- Objetos decorativos que no te gustan
- Trastos de la mesita de noche
10 cosas de tu armario
Por ejemplo,
- Prendas que no te valen
- Zapatos que te hacen ampollas
- Ropa que sigue con la etiqueta (a estas alturas no te la vas a poner)
10 cosas de la habitación de los niños
Por ejemplo,
- Juguetes rotos
- Juguetes con los que ya no juegan
- Ropa que no les cabe
Incluye a tus hijos en la operación y que sean ellos los que donen los juguetes a otros niños menos afortunados.
10 cosas de un altillo
Por ejemplo,
- Todo lo que haya en una caja que lleva años sin abrirse y ni sabías que estaba allí.
- Cosas que guardas por si acaso. Ya sabes que "por si acaso" no existe.
Recuerda, inmediatamente, sacarlo todo de casa para no acumularlo en la entrada por los siglos de los siglos. ¡Ese no es el objetivo!
Estas son sugerencias que te hago. Pero cada uno tenemos unas zonas en casa que son más prioritarias. Busca las tuyas.
Ya se sabe que los grandes cambios en la vida llevan tiempo y van poco poco, y a veces nos podemos sentir desmotivados por lo que cuesta ver los cambios. Por eso, de vez en cuando, un empujón de este tipo nos ayuda a motivarnos. Te alegrarás un montón cuando termines y te sentirás tan aliviado. ¡Cuidado porque esto crea adicción!
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